LA SITUACIÓN ECONÓMICA, LABORAL E INGRESOS DURANTE EL AISLAMIENTO SOCIAL, PREVENTIVO Y OBLIGATORIO

Por Pablo Romá, director de Circuitos Consultora

La crisis sanitaria abierta a partir del Covid-19 puso a la salud comunitaria como una preocupación central en la opinión pública. Asimismo, esta crisis sanitaria dos tendencias muy marcadas. La primera refiere a altos niveles tanto de aprobación de la acción del gobierno respecto a la crisis sanitaria, como a la imagen positiva del presidente Alberto Fernández. La segunda refiere a la preocupación por los efectos económicos y laborales que implica el período de aislamiento social en los ciudadanos.

A partir de esa preocupación, nos interesa avanzar en una fotografía sobre algunas características de la continuidad laboral y de los ingresos económicos y salariales de los ciudadanos en el período de aislamiento social preventivo y obligatorio. Para ello, hemos elaborado un sondeo de situación nacional que nos permite, a diferencia de otros instrumentos de medición, realizar una aproximación a este conjunto problemático en el corto plazo. Nuestra indagación está centrada en aspectos vinculados a la actividad laboral y los ingresos económicos y salariales de los encuestados y encuestadas durante el período de aislamiento social.

El sondeo lo realizamos entre el 23 y el 26 de abril de 2020, en un universo de mayores de 16 años que antes del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO) estaban trabajando. La muestra abarca CABA y ciudades de más de 100.000 habitantes de 14 provincias. Trabajamos en 1.416 casos. El nivel de confianza es del 95% y el margen de error muestral, de +/- 2,3.

La actividad laboral en el período de aislamiento social, preventivo y obligatorio 

La principal medida tomada por el gobierno para hacer frente a la crisis sanitaria fue decretar el ASPO y, en ese marco, determinar qué actividades económicas iban tener continuidad y cuáles no. En este sentido, la actividad laboral de la mayoría de los encuestados se ve afectada dependiendo de si se trabaja en un área definida como esencial o en un área no esencial. Los entrevistados se dividen en tres grupos generales: aquellos que continúan trabajando, aquellos que lo hacen con la modalidad de teletrabajo, y aquellos que no están trabajando.

Los consultados que se encuentran trabajando en su lugar de trabajo representan el 30.8%. Un segundo grupo, de menor proporción, continúa trabajando a través de la modalidad de teletrabajo, y representa un 23.4%. Por último, aquellos entrevistados que no están trabajando representan el 45.8% de aquellos que indicaron haber estado trabajando antes del comienzo del período de aislamiento social.

Ahora bien, que el proceso laboral esté afectado por el período de ASPO no implica en sí mismo ningún tipo de pérdida de ingresos económicos y salariales, dado que las disposiciones tomadas por el Poder Ejecutivo protegen a los ciudadanos ante la necesaria priorización de la salud comunitaria. Por ello, es importante analizar la relación entre la actividad laboral y la pérdida de ingresos económicos y salariales.

En este trabajo los encuestados y encuestadas presentaron características generales que se pueden dividir en tres grandes grupos: quienes perciben la totalidad de sus ingresos, quienes perciben solo una parte y quienes no perciben sus ingresos. Menos de la mitad de los consultados, el 43.1%, indicaron que percibieron la totalidad de sus ingresos. Al mismo tiempo, más de la mitad de los consultados indicaron algún tipo de pérdida de ingresos: mientras el 23.1% indicó que percibió una parte de sus ingresos, el 35.6% indicó no estar percibiendo ningún ingreso.

Es decir, sobre un 58.7% de los ciudadanos que están cumpliendo el período de ASPO como indica el Decreto 297/2020, no se está cumpliendo con una de las disposiciones que plantea ese acto administrativo respecto a que durante “la vigencia del aislamiento social, preventivo y obligatorio, los trabajadores y trabajadoras del sector privado tendrán derecho al goce íntegro de sus ingresos habituales” (Decreto 297/2020. ARTÍCULO 8vo).

Perfil que quienes cumplen con el aislamiento social

En este punto, nos interesa observar la situación de aquellas y aquellos ciudadanos que teniendo trabajo antes de la emergencia sanitaria, y cumpliendo con el período de ASPO, no están trabajando. Si bien lo primero que se observa es la heterogeneidad de situaciones, es interesante analizar quiénes son las personas que se encuentran en dicha situación.

Entre quienes no están trabajando en cumplimiento del período de ASPO, únicamente el 22.4% está siendo protegido por el Decreto 297/2020 al percibir la totalidad de sus ingresos. El 16.9% de los encuestados percibe sólo una parte de sus ingresos, y el 60.7% no está percibiendo sus ingresos.

De la misma manera, si analizamos el sector más vulnerable, aquellos quienes no están percibiendo ingresos, el 6.5% sigue trabajando, el 17.1% lo hace bajo la modalidad de teletrabajo, y un 77.1% no está trabajando.

SITUACIÓN LABORAL DE QUIENES NO ESTÁN PERCIBIENDO INGRESOS

Imagenes del Informe.001

Como decíamos anteriormente nos interesa saber quiénes son esos y esas trabajadoras que, teniendo trabajo antes de la crisis sanitaria, cumpliendo el periodo de ASPO no están trabajando y no están percibiendo sus ingresos. Se puede observar que los grupos de edades más afectadas por esta situación son aquellas personas entre 40 y 59 años, quienes representan el 55,5% de este grupo. Asimismo, no deja de ser importante la proporción de aquellos que son considerados grupo de riesgo: las personas de más de 60 años, quienes representan el 22,2% de este grupo.

EDAD DE QUIENES NO ESTÁN PERCIBIENDO INGRESOS Y CUMPLEN CON EL AISLAMIENTO SOCIAL

Imagenes del Informe.002

Respecto al género, podemos destacar que son mayoritariamente mujeres las que no perciben ingresos, siendo el 65% de las encuestadas, mientras que los varones representan el 35% restante.

 GÉNERO DE QUIENES NO ESTÁN PERCIBIENDO INGRESOS Y CUMPLEN CON EL AISLAMIENTO SOCIAL

Imagenes del Informe.003

De la articulación de estos datos con los de percepción de aportes podemos deducir que se trata de un sector que se encuentra fuertemente desprotegido laboralmente. Es decir, que percibe sus ingresos en negro o bajo otras modalidades. Al consultar sobre si en el trabajo le hacen aportes, el 39.6% indicó que no se los realizan, y el 44.4% indicó que no sabe si le realizan aportes. Sólo un 15.8% indicó que le realizan aportes.

FORMALIDAD O INFORMALIDAD LABORAL DE QUIENES NO ESTÁN PERCIBIENDO SUS INGRESOS Y ESTÁN CUMPLIENDO EL AISLAMIENTO SIN TRABAJAR

Imagenes del Informe.004

Esta deducción se fundamenta en el hecho de que este sector se encontraba trabajando y percibía ingresos previamente al período de ASPO. Una vez iniciado este período y cumpliendo con lo determinado por el Decreto 297/2020 se observa un retroceso laboral a partir de la paralización del trabajo que, a la vez, implica dejar de percibir ingresos.

Este grupo lo componen en su mayoría personas entre 40 y 59 años que, además, son mayoritariamente mujeres; y sus trabajos son en su gran mayoría informales ya que no se les realiza o desconocen si se les realizan aportes.

Cuando agregamos el componente subjetivo, la situación más crítica también la encontramos en torno a cómo perciben que será su situación laboral futura. Podemos destacar que en el sondeo general pesan las opiniones pesimistas o de gran incertidumbre: aquellos que piensan que su situación será peor representan el 46%, y aquellos que no saben cómo será su situación representan el 26.1%.

También podemos observar que los valores negativos son significativamente más altos, como es de esperarse, en los grupos que están cobrando sólo una parte de sus salarios y aquellos que no están cobrando. Específicamente en el grupo que estamos analizando, estas percepciones tienen un peso mayor que en el resto: de aquellos y aquellas que están cumpliendo con el ASPO, no están trabajando y no están percibiendo ingresos, el 59. 6% opina que su futuro laboral será negativo.

Es decir, se abre un abanico de interrogantes sobre la situación laboral de este grupo: ¿Volverán a su trabajo o no volverán luego del período de ASPO?; ¿Percibirán algún tipo de ingresos si se mantiene el período de ASPO y la actividad a la que se dedica está dentro del grupo de las no esenciales?; ¿Qué perspectivas tienen los grupos de riesgo para recomponer su actividad laboral? Entre los encuestados y encuestadas predomina la incertidumbre y el pesimismo.